Amado Padre del cielo,
Te doy gracias por el nuevo año que recién comienza...
Te entrego cada uno de los días que tenemos por delante, para que a cada instante tu Palabra me ilumine y dirija.
Que tu presencia me acompañe todos los días, para transitar con paz y confianza aún en tiempos difíciles.
Líbrame del mal, líbrame de accidentes, líbrame de mi propia testarudez. Que pueda comprobar cada día que es mejor refugiarme bajo tus alas, y que tu protección es eficaz para toda circunstancia.
Defiéndeme, Señor, de toda enfermedad. Dame sabiduría para no provocar falta de salud y protégeme de todo virus, bacteria y cáncer.
Dejo en tus manos cada minuto de este año, para que sea grandemente bendecido.
En el nombre de Jesús, amén